jueves, 15 de mayo de 2008

Perdona si...


Perdona si te llamo y me contestas, o no, y luego me arrepiento.
Perdona si te llamo cuando no debo, cuando no quiero y aún así lo intento.
Perdona si te llamo con un beso, con una sonrisa, con una caricia.

Perdona si no te llamé cuando debía y no creía.
Perdona si no te llamé ni te escuché cuando lo necesitabas, cuando me necesitabas.

Perdona si llega el día en que no te llame, ni me escuches, ni me arrepienta de nada.
Perdona si te llamo y ya es tarde o quizás sea pronto, si ya no contestas y huyes.

¿Hacia dónde? ¿Con quién? ¿Solo?

Perdona si te recuerdo que amar es otra cosa, sentirse ligero y libre.


Perdona si te llamo... AMOR.


(Inspirado en el libro de Federico Moccia)

sábado, 3 de mayo de 2008

Soltar, desprenderse



Por eso es tan importante dejar que ciertas cosas se vayan.
Soltar. Desprenderse.
La gente tiene que entender que nadie está jugando con cartas marcadas, a veces ganamos y a veces perdemos.
No esperes que te devuelvan algo, no esperes que reconozcan tu esfuerzo, que descubran tu genio, que entiendan tu amor.
Cerrando ciclos. No por orgullo, por incapacidad o por soberbia, sino porque simplemente aquello ya no encaja en tu vida.
Cierra la puerta, cambia el disco, limpia la casa, sacude el polvo.
Deja de ser quien eras y transfórmate en quien eres.